En su expresión más simple, puede afirmarse que una Operación Financiera es un cambio de capitales en tiempos diferentes o dicho de otro modo, una prestación de dinero no correspondida simultáneamente por una contraprestación. Veamos; A se compromete a entregar a B, en un tiempo establecido o vencimiento, uno o varios capitales. Este compromiso es la prestación de A. A su vez, B se
compromete a entregar a A, en vencimiento o vencimientos establecidos, uno o varios capitales, compromiso que representa la prestación de B, o contraprestación.
Una operación financiera puede depender de ciertos acontecimientos aleatorios, o ser independiente de ellos. En el primer caso se denomina operación financiera actuarial o de seguro; en el segundo, recibe el nombre de operación financiera en sentido estricto o de puro crédito. Nos ocuparemos exclusivamente de las operaciones financieras en sentido estricto, contenido propio de la Matemática financiera, que se define pues como la aplicación de los recursos que ofrece la Matemática para el estudio de la variación cuantitativa del capital a régimen de capitalización compuesta.
La iniciación de una operación financiera se corresponde, por regla general, con el vencimiento del primer pago; y su fin, con el vencimiento del último. Se toma como origen del tiempo el primer vencimiento y se indica con la letra n el número que corresponde al último vencimiento, y así, podemos decir que la operación financiera se desenvuelve en el intervalo de tiempo (0,n).
POSTULADO DE LA EQUIVALENCIA FINANCIERA
Definida una operación financiera, para proceder a su adecuado estudio y poder resolver los problemas a ella inherentes es necesario conocer las leyes que regulan el cómputo de los intereses que han de ser cambiados entre los contratantes. Pero el conocimiento de estas leyes no es suficiente para poder establecer relaciones matemáticas entre los datos de una operación financiera. Es necesario quedichas leyes estén vinculadas a un principio fundamental, generalmente aceptado, denominado “postulado de la equivalencia financiera”, que se enuncia como sigue:
Dada una operación financiera llevada a cabo en el intervalo de tiempo ( 0, n ), se verifica que en un tiempo cualquiera del mencionado intervalo el valor de todas las prestaciones de A es igual al valor en el mismo tiempo
de todas la prestaciones de B.
La palabra “todas” sirve para interpretar el complejo de prestaciones pasadas y futuras.
Este postulado tiene una importancia particular cuando se refiere a relaciones de tiempo correspondientes a cada uno de los extremos del intervalo (0,n): o sea, al tiempo 0 en el cual las prestaciones de los dos contratantes están todavía por hacerse, y en el tiempo n en que todas las prestaciones de ambos contratantes se han verificado ya.
Si representamos con y con
, respectivamente, el valor al tiempo 0 y el valor al tiempo n de las prestaciones de A, y con
y
las correspondientes contraprestaciones de B, podremos expresar el postulado de la equivalencia financiera con las dos siguientes igualdades:
Puesto que al tiempo 0 las prestaciones de los dos contratantes son futuras, podemos decir, en virtud del postulado de la equivalencia financiera, que en este tiempo el valor de las prestaciones futuras de A es igual al valor de las prestaciones futuras de B. Esta igualdad respecto al valor de las futuras prestaciones puede no subsistir en tiempos sucesivos a 0 y precedentes a n. Podemos, por tanto, concluir quela diferencia entre los valores de las futuras prestaciones de los dos contratantes varía al variar el tiempo, y es igual a 0 en los extremos del mismo.
Esta diferencia se llama “reserva matemática” o “saldo financiero”, y tiene una gran importancia en la teoría y en la práctica de las operaciones financieras. En particular, en los préstamos a dicha diferencia se le denomina “residuo debido”, “capital vivo” o “capital pendiente de amortización”.